CORECC suma representantes para fortalecer políticas climáticas

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CNG, Fundación Reverdesierto y Fundación Mariposas de Miraflores serán los nuevos representantes en el Comité Regional de Cambio Climático (CORECC), asegurando participación local en políticas climáticas de Tarapacá.

En una decisión sin precedentes, la región de Tarapacá dio un paso clave para su gobernanza climática, incorporando a ONGs en el Comité Regional de Cambio Climático (CORECC).

La finalidad de esta incorporación es fortalecer la representación de la sociedad civil en la planificación y ejecución de estrategias climáticas, en un modelo de participación rotativo en el que tres ONGs asumen un papel activo en la toma de decisiones:

  • Fundación Reverdesierto (primer periodo de representación)
  • Corporación Norte Grande (segundo periodo de representación)
  • Fundación Mariposas de Miraflores (tercer periodo de representación)

Esta estructura de representación rotativa surgió a partir de una propuesta de la Corporación Norte Grande, con el objetivo de garantizar una participación equitativa y diversa en los dos años de mandato. De esta manera, se optimiza el aporte de cada organización según sus áreas de especialización, en pos de asegurar una mirada integral para abordar los desafíos climáticos de la región.

El CORECC tiene como misión integrar la dimensión climática en las políticas regionales, incentivar la captación de recursos para implementar acciones y planificar estrategias a largo plazo. Con la incorporación de las ONGs, se garantiza una representación pluralista que permitirá incluir la mirada territorial en las decisiones climáticas de Tarapacá.

En el periodo de representación de CNG, el equipo estará integrado por Melissa del Canto, Ingeniera Civil Ambiental del Equipo Altiplano, y Enzo Rojas, Biólogo Marino del Equipo Borde Costero. La corporación aportará un punto de vista técnico y con conocimiento desde el territorio, sumando experiencia en la gestión y protección de los ecosistemas locales.

Este avance representa un paso importante hacia la construcción de una región más inclusiva y participativa en cuanto a la lucha contra el cambio climático, y refuerza la relevancia de trabajar de manera conjunta, integrando a la sociedad civil en los procesos de toma de decisiones.

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